Rumiñahui

Rumiñahui, cuyo nombre significa Cara de Piedra de piedra para los incas quiteños, el Ojo de piedra para los cuzqueños, sirvió a Atahualpa con valor e intrepidez, y junto a Quisquís y Chalcuchimac lo acompañó durante la guerra que libró contra Huáscar, siendo el principal baluarte del triunfo en la histórica Batalla de Quipaipán, que convirtió a Atahualpa en el único soberano del Tahuantinsuyo.
El 10 de enero de 1535 fue ahorcado junto a otros célebres generales quiteños.